El obispo de Cádiz y Ceuta, Rafael Zornoza Boy, sostiene que quien critica el currículo de la asignatura de Religión "o es que no conoce lo que es esta cosmovisión y por lo tanto es ignorante de la vida cristiana, o lo hace por un fanatismo y un fundamentalismo laicista que, de alguna forma, quiere imponer una visión única de la realidad y que, al final, no tolera las diferencias".
En una entrevista concedida a Europa Press, Zornoza asegura que las críticas recibidas "son muy superficiales y posiblemente hayan venido de alguna postura así; no han sido tantas y sí un poquito unilaterales".
Explica que "un temario tiene que enseñar el contenido de la fe y de la vida cristiana, y tiene que ajustarse siempre a la doctrina". "La Iglesia tiene mucha historia, una historia con una cultura, y en su bagaje ha recuperado el fondo de la filosofía griega para occidente, el derecho romano y la tradición judeocristiana que está presente en la Biblia", añade.
En esta línea, apunta que "en su síntesis hay una mezcla de fe y razón", y recalca que "nadie valora en este momento más la razón a la hora de creer la fe" que la Iglesia, y que su fe "no es una fe aislada".
"Todo esto ha producido como consecuencia un humanismo cristiano que incluso siguen muchos que no son cristianos", indica, al tiempo que defiende que la asignatura de Religión "significa una cosmovisión de las cosas, una antropología, una visión del hombre, una metafísica por la que se ha regido el mundo, por lo menos occidente, durante muchísimos siglos".
"LIBERTAD DE ENSEÑANZA"
El obispo de Cádiz y Ceuta dice que "no basta con proclamar los derechos de la libertad de enseñanza", sino que "hay que respetarlos y hay que trabajarlos". "La libertad está en los padres y en los interesados para elegir que se imparta o no la asignatura de Religión a los niños", apostilla.
Al hilo, incide en que "los padres tienen derecho a poder educar en religión católica" a sus hijos, precisando que "la asignatura de Religión no es catequesis", y considera que "el que no tenga hoy un conocimiento al menos superficial de lo que es la vida y cultura cristiana, no da un paso en la cultura española ni en la occidental".
Finalmente, remarca que la religión católica "ha marcado la vida, las costumbres, el lenguaje y el pensamiento de todo un pueblo". "Quien sea además cristiano, ¿cómo no va a querer conocer eso?", se pregunta, aconsejando a quien no sea cristiano que curse la asignatura "por cultura".
TE INTERESA
No hay comentarios:
Publicar un comentario